ENAMORARSE..................O NO ENAMORARSE

** LA ESPERA PARA DECIDIR AMAR ES COMO ESPERAR A UN TREN QUE YA HA PARTIDO**.

Con esta entrega cierro la trilogía dedicada al amor, con un conocimiento real, el amor siempre va acompañado de sus tres componentes básicos: libertad, respeto y ternura, si quien le ama a usted su amor no lleva incluidos estos componentes…………no es amor……….será otra cosa.

LOS HOMBRES PIENSAN QUE DEJAN DE ENAMORARSE CUANDO ENVEJECEN, SIN SABER QUE ENVEJECEN CUANDO DEJAN DE ENAMORARSE. (Gabriel García Márquez)

NUNCA ES TARDE. SI DECIDIMOS ENAMORARNOS, LLEGARÁ EL AMOR A NUESTRA VIDA. Y, SI POR EL CONTRARIO, PENSAMOS QUE, DADAS LAS CIRCUNSTANCIAS Y LAS EXPERIENCIAS VIVIDAS, YA NO NOS PODEMOS ENAMORAR, SUCEDERÁ QUE EL SENTIMIENTO DE AMOR NO PODRÁ LATIR EN NUESTRA CONSCIENCIA. Pero, en realidad, una cosa es decidir enamorarse y otra muy distinta es pensar que “necesitamos” al otro sexo y del sexo para sentir amor.

Muchas personas piensan que enamorarse es además obsesionarse con el objeto de su pasión y experimentar un revoloteo de hormonas que más se parecerá a un “desequilibrio emocional” que a un estado de plenitud serena.

Sin embargo, vivir en-amorado es sentirse fluyendo en la corriente de afinidad, complicidad, vibración y empatía con la vida junto a otros seres que ríen y lloran. Vivir enamorado, en realidad, es vivir entusiasmado, con toda la calidad de energía-sentimiento que cada segundo expande. Una capacidad de la inteligencia emocional que permite darse cuenta a cada instante de que uno aprende y disfruta de todo lo que busca y llega.

Para estar enamorado no hace falta que exista una persona única y especial porque cuanto más enamorados estamos, más especiales son los amigos y hermanos de la vida, más entrañables son los hijos y los padres, más interesantes son los desconocidos, los animales y las cosas, más belleza vemos en el cielo, en la tierra y más conscientes somos de todo lo creado y la energía universal que nos cohesiona y une a todos, con todo.

Cuanto más enamorados decidimos estar, más sentido tiene sentarse a sentir, contemplar los pensamientos y permitir que la alegría de vivir circule por el cuerpo, mente y espíritu. SI ADEMÁS EXISTE UNA PERSONA MUY ESPECIAL DONDE EL BAILE DE AFINIDADES Y VIBRACIONES, NOS PERMITE COMPARTIR EL DESCUBRIR DE MUCHAS PEQUEÑAS COSAS, ES PERFECTO. Y si ésta todavía no ha aparecido, uno no deja de seguir enamorado del proyecto esencial de su propia vida en unión y compañía de otros viajeros que al igual que nosotros, también escuchan la música del alma. Tan sólo se precisa desactivar, el miedo a correr riesgos íntimos que nos posibilitaran viajar desde nuestro corazón, a convertirnos en lo que amamos.

El Amor brota en la comunicación sincera, en la contemplación del ocaso y en la música que nos emociona. El Amor surge cuando asistimos a la transformación en nosotros mismos y señalamos con ternura la dirección a las estrellas. El Amor nace cuando despedimos a un alma que recorrió ya su camino y cerrando los ojos cruza el puente hacia el Gran Espíritu. Es Amor lo que aparece cuando comprobamos que alguien resulta aliviado con aquellas claves de lucidez que compartimos en aquel momento de su desgracia. Es Amor lo que nace cuando sentimos nuestra vida como un rosario de perlas útiles a los propósitos evolutivos que, aquí y allá, nos llaman y convocan. El Amor brota cuando nos sentirnos útiles al propósito central de nuestro proyecto de vida. Se trata de un estado de conciencia que permite ver, cada día, un mundo nuevo aunque, a veces, parezca que no pasa nada.

¿ENAMORARSE? SÍ Y SÍ. AMAR ES VIVIR DESPIERTO Y CAMINAR CONSCIENTE Y CON DESTREZA ENTRE LOS DÍAS DE SOL Y NUBES. USTED SABE QUE NUNCA ES TARDE PARA DECIR SÍ QUIERO Y HACERSE AMANTE DEL ALMA. DEL ALMA DE LA PERSONA QUE TIENE A SU LADO, DEL MUNDO Y DE LA SUYA PROPIA. 

Amar es como decía una famosa frase de una película……………”AMAR ES NO TENER QUE DECIR NUNCA……….LO SIENTO”.